Afanosamente buscada por el gobierno priista de Enrique Peña Nieto, por los partidos PRD y MC (Movimiento Ciudadano), así como por un sector del PAN, la legalización del llamado matrimonio gay en México está ahora siendo impulsada por el opositor de todos ellos: MORENA.
Así que la familia natural en México se ve atacada desde todos los flancos partidistas…y la iniciativa pro gay de Peña Nieto que tanto rechazo popular generó hace exactamente 6 años, se está imponiendo, pero mediante rebanadas pequeñas. No de golpe, no de un solo bocado, como pretendió EPN, sino poco a poco, lentamente, Estado por Estado de la República.
Tal fenómeno hace comprensible la paradoja que vive México: partidos políticos supuestamente rivales, aparentemente irreconciliables…en temas sustantivos, de fondo, coinciden, van de la mano.
En efecto, en lo coyuntural, dichos Partidos cotidianamente discrepan, furiosamente se atacan todos los días a través de las Redes sociales y entretienen al gran público, que con ello ve no solo como opositores sino incluso como enemigos, de un lado a la coalición socialdemócrata VA POR MÉXICO y del otro a MORENA.
Pero cuando se hace una pausa y se analiza, la realidad es totalmente distinta.
Los Partidos políticos mexicanos se atacan entre sí por negocios, por proyectos…pero en lo verdaderamente importante y trascendente, están de acuerdo.
Hace exactamente un año, en efecto, entre marzo y abril del 2021, el equipo de Investigaciones de la AGENCIA CATÓLICA DE NOTICIAS documentó de forma plena, irrefutable, cómo diputados supuestamente “católicos” del Partido Acción Nacional (PAN), junto con los del PRI, Movimiento Ciudadano y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), avalaron las iniciativas pro aborto, pro LGBTIQ y anti libertad religiosa, del gubernamental MORENA.
Algunos de esos diputados habían venido engañando a los señores obispos de México, presentándose como fieles guardianes de la doctrina católica. Nada más falso. Todas las reformas de MORENA contra la libertad educativa, contra la libertad religiosa, contra la vida, contra el derecho de los padres de familia a elegir el tipo de educación para sus hijos en las escuelas…recibieron el respaldo –tanto en “Comisiones” como en el pleno de la Cámara de Diputados–, de legisladores que durante años se presentaron públicamente como “católicos”.
Fotografías, actas de las sesiones del Congreso, firmas y declaraciones, fueron exhibidas por el equipo de Investigaciones de la AGENCIA CATÓLICA DE NOTICIAS. Ahí estaban los legisladores supuestamente “católicos” que, sin embargo, en lo oscurito empoderaban a la entonces Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y sentaron las bases para la imposición de la denominada Agenda Global LGBTIQ en México.
Ahora, en una nueva engañifa al electorado ingenuo, por razones de mercadotecnia electoral, esos mismos Partidos políticos que secundaron a MORENA en todas sus Iniciativas sustanciales –esto es, las que van a la raíz, a la base de la convivencia social, como son la vida y la familia–, se presentan en estos momentos como “opositores”, vía la Coalición socialdemócrata VA POR MÉXICO. Y dicen estar en contra de la agenda legislativa de MORENA…pero los hechos irrefutables que aquí presentamos a continuación, demuestran la conducta esquizofrénica del PAN, del PRI, del PRD y de Movimiento Ciudadano.
Sólo para efecto de ganar votos –rumbo a los comicios presidenciales del 2024–, entre el electorado ingenuo, olvidadizo, los Partidos de VA POR MÉXICO se presentan coyunturalmente como enemigos de políticas que ellos solapan y/o abanderaron y promovieron, como quedará de manifiesto en las siguientes líneas. Uno de los casos más notorios es el de la legalización de las llamadas bodas gay, uniones del mismo sexo o “matrimonios igualitarios”.
Así las cosas, ¿cómo olvidar, por ejemplo, que el gobierno del PRI, encabezado por Enrique Peña Nieto, promovió abierta, pública, legalmente, la implantación del matrimonio gay?
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¿Cómo pasar por alto que el gobierno del PRI presentó formalmente en mayo de 2016 la Iniciativa prometida por Peña Nieto, de modificar el artículo 4 de la Constitución para legalizar las bodas gay al amparo "de reconocer como un derecho humano, que las personas puedan contraer matrimonio sin discriminación alguna", según rezaba la exposición de motivos?.
El lanzamiento de la Iniciativa pro gay del gobierno priista de Peña Nieto, fue secundada por miembros de su gabinete y destacados militantes del Partido Revolucionario Institucional, como José Antonio Meade, Claudia Ruíz Massieu y Miguel Angel Osorio Chong.
Sin embargo, a pesar del esfuerzo del aparato político del gobierno priista por convertir la Iniciativa de Peña Nieto en ley, la reacción popular en contra, superó y anuló el pacto intrapartidista para aprobarla en el Congreso. Así es. La reacción social fue de amplio y vehemente rechazo a nivel nacional. Se organizaron manifestaciones de repudio en todo el país, que rebasaron las expectativas del Sistema.
Las protestas de los mexicanos capturaron la atención mundial.
Nadie puede olvidar lo sucedido hace apenas 6 años.
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¿Cuál fue la reacción del Sistema ante las grandilocuentes marchas apoyadas por los obispos en todo el país?
Luego de que se llevaron a cabo tales marchas, no se produjo en público modificación alguna por parte de Peña Nieto o del PRI. Esto es, el gobierno no retiró la Iniciativa, ni los priistas se deslindaron de ella. Por el contrario, la conflictiva Iniciativa del priista Peña Nieto fue sostenida en el Congreso. Se le hizo seguir los cauces normales.
Sin embargo, tras bambalinas, al realizar una evaluación interna de carácter político-electoral –dado que la Iniciativa pro gay se presentaba a un año de que el PRI escogiera a su candidato a la Presidencial–, las fuerzas políticas que sustentan el Sistema, con el fin de reparar los daños, hábilmente desplegaron un mecanismo de defensa con cuatro vertientes:
1.- A pesar de la oposición popular, acordaron que la Iniciativa no se retiraba.
2.- De la misma manera, decidieron que un grupo de legisladores priistas votaría en favor de ella en ‘Comisiones’ e incluso –como sucedió–, que un diputado priista se declarara abiertamente gay, para con ello mantener el apoyo de la comunidad LGBTIQ. Fue el caso del entonces diputado Benjamín Medrano Quezada, quien se manifestó de manera pública homosexual, declaró estar orgulloso de serlo y advirtió que votaría en favor de la propuesta de Peña Nieto.
EL ENTONCES PRIISTA GAY, BENJAMÍN MEDRANO QUEZADA.
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3.- Para aparentar que el PRI-Gobierno no se sentía afectado por la reacción popular en contra de la iniciativa pro gay, acordaron generar solo deslindamientos de ella, por parte de las cabezas de los grupos asociados en el poder en esos momentos:
César Camacho –líder de los diputados del Revolucionario Institucional y representante del Grupo Atlacomulco– dijo que la iniciativa del matrimonio igualitario y adopción para parejas del mismo sexo “no está en nuestras prioridades”;
En tanto que Emilio Gamboa -líder de los senadores del mismo Partido y representante oficioso del salinismo–, expresó que la Iniciativa pro LGBTIQ de Peña Nieto “no formaba parte de la agenda legislativa del PRI” .
4.- El anzuelo envenenado lo dejaron, sin embargo, en la cuarta medida acordada: que diputados priistas y panistas habrían de rechazar votar en favor de la Iniciativa de Peña Nieto –y así sucedió–, no por cuestiones de fondo…sino “porque al Congreso federal no le corresponde hacerlo, sino a los Congresos locales”.
Es decir, Peña Nieto y el PRI quedaban así salvados. Los congresistas del PRI-PAN no lo presentaban como derrotado por las masivas marchas anti gay, sino simplemente que su Iniciativa LGBTIQ no requería de la aprobación del Congreso federal.
Panistas, así, argumentaban “razones técnicas”, no doctrinales, para no votar en favor de la propuesta peñista:
“(...) diputados del PAN, del Partido Verde, Encuentro Social, Nueva Alianza y otro grupo del PRI manifestaron que le corresponde a cada entidad legislar en materia civil, por lo que, dijeron, avalar la iniciativa presidencial podría entrar en conflicto con la autonomía de los estados,” puede leerse en la crónica de ese 9 de noviembre de 2016 en Animal Político.
De esa manera, los socios en el “Pacto por México” del peñanietismo –hoy revivido bajo la denominación “VA POR MÉXICO”--, es decir, lo que popularmente se conoce como PRIAN, dejaban la tarea, el encargo de legislar en favor de los matrimonios gay, a los Congresos locales.
Y es así como ha sucedido. Amparados en una resolución de la Suprema Corte bajo dominio priista, Estado por Estado de la República Mexicana se ha ido imponiendo la Iniciativa de Enrique Peña Nieto: legalización de las bodas gay y, de refilón, la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo.
La “salida” honrosa que le dieron panistas y priistas a la Iniciativa de Peña Nieto en favor de las bodas gay, de encargar la tarea a los Congresos estatales, solo a algunos podría parecerles sorprendente. ¿Pero en realidad se trató de algo inusitado por parte del PAN? No. Porque…
Un año antes de que Peña Nieto propusiera la legalización de las bodas gay y la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo, Ricardo Anaya ya se había manifestado en ese mismo sentido.
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Y lo mismo sucedió con Margarita Zavala, la esposa de Felipe Calderón, quien durante una entrevista concedida en junio de 2015 dijo al periodista Jorge Ramos: "Yo no tengo ningún problema (con el matrimonio homosexual)". Puede consultarse el vídeo, aquí.
Y un año después del rechazo popular a la Iniciativa de Peña Nieto, es decir, en 2017, panistas votaron en favor de la eutanasia y las bodas gay, en la gestación de la Primera Constitución para la Ciudad de México.
En otras palabras, los integrantes de lo que hoy es VA POR MÉXICO fueron los que permitieron la inclusión de bodas gay en la primera Constitución de la capital de la República, como puede observarse. Ellos fueron los que “inclinaron la balanza”:
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Y por si ello no fuera suficiente, un año más tarde, esto es, en 2018, el PAN constituyó una Coalición o Frente electoral con los socialdemócratas PRD y MC (Movimiento Ciudadano), Partidos pecisa, significativamente, promotores de la legalización del aborto, de las bodas gay y de la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo.
Es decir, en forma reiterada, panistas, perredistas, priistas y emecistas desestimaron el clamor popular, menospreciaron el rechazo generalizado hacia la agenda LGBTIQ y dieron la espalda a las multitudes que en el 2016 se habían lanzado a las calles de todo el país para abominar el intento de imponer bodas gay, aborto y adopción de niños por parte de parejas homosexuales.
Pero lo más cínico del asunto es que tal “Frente” o “Coalición” de PAN, PRD y MC, para las elecciones del 2018, dijo constituirse “para sacar al PRI de Los Pinos”.
Y fue así que mediante la “coalición” o “Frente” electoral socialdemócrata, en 2018 el PAN hizo suyos a candidatos que enarbolan la agenda LGBTIQ y la legalización del aborto, la eutanasia y la sodomización de los niños mexicanos mediante el endoctrinamiento en las escuelas con la Ideología de Género.
ALEJANDRA BARRALES, CANDIDATA PRO LGBTIQ DEL PAN, DEL PRD Y DE MC.
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Pero no todo quedó cerrado en el 2018, con la postulación de múltiples candidatos pro LGBTIQ por parte del “Frente” socialdemócrata del PAN, PRD y MC…
Un amplio sector de la ciudadanía se sintió traicionado por el PAN, ya que después de las masivas marchas de protesta contra la Iniciativa pro gay de Peña Nieto, Acción Nacional asumió candidaturas de promotores de la agenda LGBTIQ. Este fenómeno provocó que muchos votaran contra el PAN-Frente socialdemócrata.
Ello no obstante, es decir, a pesar de haber perdido las elecciones presidenciales y la mayoría legislativa en los comicios de 2018, los legisladores “católicos” del PAN y sus aliados del PRI, del PRD y del MC (Movimiento Ciudadano) refrendaron su compromiso no con la ciudadanía sino con la Agenda gay y, en forma reiterada, en el Congreso federal votaron a favor de las Iniciativas pro aborto, pro LGBTIQ y contra la libertad religiosa que presentó MORENA en los primeros tres años de gobierno de AMLO (Andrés Manuel López Obrador). Es decir, lo que le negaron a Peña Nieto, se lo concedieron a MORENA, a “La 4T”. El equipo de Investigaciones de la AGENCIA CATÓLICA DE NOTICIAS así lo reveló hace exactamente un año, en los siguientes trabajos:
(el texto completo,aquí).
(el texto completo,aquí).
(el texto completo, aquí).
(el texto completo, aquí).
(el texto completo, aquí).
(el texto completo, aquí).
La historia no ha terminado, desgraciadamente, para las familias mexicanas. MORENA ha tomado la estafeta priista-peñanietista pro gay y, junto con panistas, priistas, perredistas y emecistas, ha cumplido lo anunciado en 2016: aprobar la legalización de las bodas gay, Estado por Estado.
Las pruebas del compromiso del PAN con la Causa LGBTIQ:
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Lo que hicieron los panistas, primero en Querétaro, el año pasado (2021):
(el texto completo, aquí).
Y después, en Guanajuato:
(el texto completo, aquí).
(el texto completo,aquí).
¿Dónde están, pues, los legisladores “católicos” que decían defender los principios y valores cristianos y naturales?
Un análisis honesto, profesional, descubre que la legalización de las bodas gay, pues, no es una bandera exclusiva de MORENA, sino como acabamos de demostrar, forma parte de la agenda de fuerzas revolucionarias que buscan, entre otras cosas, destruir la familia y contribuir al establecimiento de un Nuevo Orden contrario al Natural. Y que dichas fuerzas anidan en todos los Partidos políticos…sin excepción.
De todo lo expuesto en esta primera entrega, queda en claro que las fuerzas revolucionarias comprometidas con la Agenda LGBTIQ se dieron cuenta que, de un solo bocado, como lo pretendió Peña Nieto, les resultaría muy caro imponer las bodas gay en México, debido a la gran oposición popular. En cambio, mediante rebanadas más pequeñas, Estado por Estado, les está resultando más fácil alcanzar su objetivo.
